miércoles, 5 de noviembre de 2008

Libre.



Dejo todo lo mundano,
extraviando mí deseo,
como el vuelo de algún ave,
que de arriba ve el desierto.

Yo no quiero marcar rumbos;
sí anhelo ser honesto;
y volando hacia la cima,
¡Ay! Montaña, soy pequeño.

Y en poemas con mil caras,
mostraré versos felices.
cantaré que amo la vida,
al que lea y que no es libre.

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