… y me hablaron ciertos versos.
-¡Pero tú nos escribiste!
Más ustedes me dijeron.
-¡Pero tú nos escribiste!
Más ustedes me dijeron.
-¿Y qué deseas, tú aquí?
Yo quiero ser un poeta…
-¿Y sin más, lo dices así?
Sin más yo les voy oyendo,
si ustedes así me guían
¿Es mutuo el entendimiento?
-Estamos en lo etéreo;
más no tú; adorado amigo;
¿Verdadero es tu deseo?
Son auténticas mis ansias;
¿Qué no ven que siempre escribo?
-¡Oh, sí vemos tal audacia!
-Pero dinos, estimado:
-¿A quien das tu poesía?
Yo la entrego al que es amado…
-¿Es que escribes para uno?
-¡Qué egoísmo escuchamos!
¡No es así; es para muchos!
-¿Y es que amas tanta gente?
Mucho amo a lo humano;
Sobretodo al que está ausente.
-Tal vez seas ser astuto;
Ayudemos al confuso,
Tú, nosotros y los Musos.
¿Seré entonces un poeta?
-Escribano nuestro seas;
por que el cielo lo desea.
-Escribe versos, querido;
hoy otorgamos permiso,
el universo así lo ha dicho.
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